Por: Melanie M. Pérez Aparicio

El pasado sábado 9 de julio, el Teatro de la Ciudad abrió sus puertas a Almacenados, que desde 2012 había sido protagonizada por Héctor Bonilla y su hijo Sergio. En esta nueva temporada es Fernando Bonilla quien da vida al señor Lino, quien caracterizado como una persona mayor logró sacar un par de risas al público asistente.

Almacenados cuenta la historia de don Lino (Fernando Bonilla), quien luego de 29 años trabajando para un almacén por fin será jubilado, por ello recibe a su ayudante Nin (Sergio Bonilla), un joven que ocupará su lugar. Para esto deben pasar cinco días en el almacén donde el joven será instruido para lograr un trabajo impecable como el que ha venido desarrollado don Lino. Sin embargo, Nin no tardará en percatarse de que en ese viejo almacén no pasan muchas cosas y comenzará a interrogar a su compañero para descubrir la verdad sobre aquel extraño trabajo, creando así una curiosa relación de compañerismo.

Luego de 10 años en cartelera, Almacenados llegó a su séptima temporada y quisieron celebrar ofreciendo esta función en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris donde le regalaron al público una historia entrañable, con un humor tan natural que puso a todos a reír y dos personajes que logran robarse el corazón del publico.

La puesta en escena basada en el texto de David Desola, esta última temporada ha sido una especie de homenaje hacia Héctor Bonilla quien dejara el personaje de Lino debido a complicaciones con su salud, a partir de entonces Fernando se unió a su hermano y la obra ha seguido adelante y continúa gustando bastante, pues es una mezcla de metáforas sobre la vida y la necesidad de ser recordados y reconocidos durante nuestra existencia, también juega con los contrastes generacionales y sus discrepantes perspectivas de vida.

Al finalizar la función, subió al escenario Bruno Bichir, y en compañía del público, la presencia de la familia Bonilla y la compañía de teatro Puño de Tierra, develó la placa que conmemora no sólo diez años de vida de esta compañía, sino todo el esfuerzo y dedicación de quienes en ella colaboran y que han logrado llevar a los escenarios 25 puestas en escena.

Fue un gran acierto elegir esta obra para conmemorar su aniversario pues tiene bastantes cosas su favor, es una historia con la que es fácil identificarse y conmoverse, recuerda a los más grandes esa inocencia de la juventud y en los jóvenes pone el retrato de la vejez y sirve como base para empatizar entre individuos. Las actuaciones son precisas, no se necesita más que este par de grandes actores para ambientar toda la historia, si ben se vale de poca escenografía el verdadero peso está en el guión que es simplemente perfecto.

No nos queda más que esperar una siguiente temporada de Almacenados porque definitivamente está entre los imperdibles del teatro. Te dejamos una galería de fotos de esta función especial: